Urgencias por la covid-19 en el Municipio de Pimentel

Hoy Digital 21/4/2020 – Entre los instrumentos que por su escasa disponibilidad están costando vidas humanas figuran los respiradores mecánicos que en ocasiones son la única forma de oxigenar pulmones al borde del colapso. El inusitado crecimiento de la demanda de este recurso de salvación, que solo podría ser cubierta con esfuerzos extraordinarios e impostergables, augura mayores crisis en la salud colectiva y defunciones a corto y mediano plazos. En algunas localidades dispersas por el territorio nacional existen ejercicios médicos a mano “pelá” sin equipos de pruebas para determinar el origen de agudos trastornos respiratorios ni herramientas para combatirlos promisoriamente. Es el caso del municipio de Pimentel, con notables decesos.

La solidaridad de liderazgos ciudadanos, con aportes para hacer más efectivos mecanismos asistenciales que ponen de su parte, no ha logrado llenar huecos para cruciales objetivos. Contra el elemental requisito de portar mascarillas, y preferiblemente enguantarse también, prima una desconcertante escasez en establecimientos del ramo. Bajo signos de especulación deshumanizada, solo pagando precios excesivos resulta posible su obtención, vedada para muchos de los pobres. Los artículos de usos terapéuticos y las informaciones que orientan para protegerse del virus, entre ellos ventiladores y salas de internamiento, deben estar más a la mano de las poblaciones vulnerables.

El deber llama a padres, maestros

Algunos atestiguan con todo crédito, que la educación virtual, la “on line”, apartada de lo usual, ha ganado terreno en esta crisis. Que el aprendizaje no presencial se mueve por los confinamientos familiares. Pero vencer la inercia a que invita esta liberación de la docencia ordinaria no sería difícil en niveles sociales que contribuyen a una formación hogareña satisfactoria. Otro gallo canta cuando la pobreza hace difícil cada cosa y falta consciencia en tutores.

He ahí un reto para niveles de la enseñanza pública con miles de aulas pobladas por niños nacidos de progenitores de poca aptitud para conducir proles hacia una novedosa tecnología que les permitiría recibir clases. La desconexión habitual entre padres de alumnos y profesores resulta frustratoria y obliga a fuertes ejercicios de autoridad y compromiso sobre los maestros.